Con vistas al lado corto de la actual plaza Fontane Marose, antigua plaza de Luccoli, el palacio se construyó a mediados del siglo XV por voluntad de la familia Spinola, que lo tuvo hasta principios del siglo XIX.

La fachada presenta la característica alternancia con bandas bicromas blancas y negras, realizadas con mármol blanco de Carrara y la típica piedra de Promontorio.

En memoria de los antepasados de la familia se colocan, en nichos especiales, cinco estatuas, la última no bien identificada, que representa, de izquierda a derecha, Oberto, Corrado, Opizzino, Calvot. Después de una larga serie de modificaciones realizadas como consecuencia de la apertura de Via Carlo Felice, la actual Via XXV Aprile, y de la reorganización de los desniveles del terreno, el edificio fue comprado por un Instituto de Crédito entre finales de los años ochenta y principios de los noventa del siglo pasado. Pronto se inició una restauración general por mano de los arquitectos Tommaso Badano y Lionello Calza.